¿Se puede utilizar agua en el radiador?
Es muy común ver en las calles a personas utilizar agua en el radiador, pero surge varias preguntas que vamos a responder a continuación. ¿es lo más conveniente? ¿puede dañar el radiador? ¿existen mejores opciones?
Es muy probable que hayas visto en películas o series antiguas como ante un sobrecalentamiento usaban agua para enfriar el radiador, era la solución al problema y el motor funcionaba con normalidad. El tiempo pasa y los líquidos refrigerantes son más eficientes.
Si vemos la composición química del agua se denomina químicamente H2O. Esa “O” significa oxígeno, por lo que puede oxidar y corroer partes del circuito. Además, el agua cambia su estado líquido a sólido a menos de 0ºC y se comienza a evaporar a partir de los 100ºC.
¿Esto qué significa? Pues significa que si utilizamos agua como refrigerante y dejamos nuestro carro estacionado en la calle en determinadas horas del calor existen posibilidades de que ese fluido del sistema de refrigeración se evapore, algo que no nos interesa para nada. Por otro lado, la baja temperatura (cosa poco probable en nuestro país) pueden facilitar, la congelación del líquido.
Cabe resaltar que, si por unas razones u otras utilizamos simplemente agua como líquido refrigerante, no debe ser del chorro. El agua del chorro trae consigo cal, que atacaría y obstruiría a medio plazo partes del circuito. Por tanto, de usar agua, que sea destilada o desmineralizada.
Las ventajas que ofrece el líquido refrigerante frente al agua se consiguen gracias a una serie de aditivos. Estos suplen los inconvenientes del agua al reducir el punto de congelación hasta unos 30ºC bajo cero aproximadamente, aumenta el punto de ebullición unos 20ºC ó 30ºC y evita el óxido y la cal.
En resumidas cuentas: los líquidos refrigerantes, pese a que no mejorarán el desempeño de nuestro vehículo, garantizan un mejor funcionamiento y cuidado de este comparándolo con el agua normal y corriente. Podemos usar agua destilada, pero es más recomendable utilizar este tipo de líquidos con unos aditivos pensados especialmente para alargar la vida de del circuito y garantizar una mejor refrigeración.
Pueda que ante una fuga en el sistema te veas tentado a usar agua por ser más económico y factible utilizarla en el momento, pero recuerda que puedes dañar, picar o obstruir tu radiador, lo cual a largo plazo implica un gasto mucho mayor a la inicial con la fuga.
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